Mijaíl Gorbachov (Mikhail Gorbachev), celebrado en el extranjero como el salvador que entregó la libertad a millones de ciudadanos soviéticos, a menudo se le culpaba por los años caóticos que siguieron y sobrevivió lo suficiente como para ver cómo Rusia volvía a la autocracia bajo el gobierno de Vladimir Putin.
Gorbachov fue el primer y último presidente de la Unión Soviética. Se convirtió en secretario general del Partido Comunista en 1985, con solo 53 años, cargo que ocupó hasta que el partido se disolvió en 1991, con la desaparición de la Unión Soviética poco después. Su decisión de no usar la fuerza para evitar la caída del Muro de Berlín, según afirmó más tarde, evitó una tercera guerra mundial.
Cuando hablamos de Gorbachov es inevitable asociarlo con sus intentos de modernizar y mejorar la Unión Soviética, un proceso del que finalmente perdió el control y que llevó al colapso del país. Fue la reticencia de Gorbachov a utilizar soluciones de fuerza lo que más tarde le valdría el premio Nobel de la paz.
Descartó la doctrina Brezhnev, por la cual Moscú se reservaba el derecho de aplastar la disidencia dentro de los estados clientes del Pacto de Varsovia. También forjó relaciones con líderes mundiales y se hizo amigo de Margaret Thatcher, quien dijo sobre el joven y nuevo primer ministro de Moscú: «Podemos hacer negocios juntos».
También se entusiasmó con Ronald Reagan, con quien acordó en 1986 reducir los misiles nucleares de medio alcance en Europa, y quien luego instó a Gorbachov a “¡derribar!” el muro de Berlín.
En 1988, Gorbachov retiró las tropas del desastre soviético en Afganistán. Y en el verano de 1989, dijo que los países comunistas eran libres de determinar sus propios asuntos internos.
En una entrevista con The Guardian en 2011, todavía parecía amargado por el ascenso de su archirrival: “Probablemente, fui demasiado liberal y democrático con respecto a Yeltsin. Debería haberlo enviado como embajador a Gran Bretaña o tal vez a una excolonia británica”, dijo. Sin embargo, su decisión de dimitir sigue siendo un acto singular y respetado entre muchos liberales rusos en la actualidad.
Si quieres conocer más detalles de la vida de este importante personaje y de los follonsitos que por aquel entonces se producían en la antigua URSS, quédate con nosotros y visitemos la Rusia comunista de la mano de Xavi para descubrir un montón de hechos y curiosidades de lo más interesantes. Camarada!!! Aquí comienza un nuevo episodio de BFYM.
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